¿La depilación láser también elimina los vellos encarnados?

 

Sí, y de hecho es uno de los grandes beneficios que muchas personas descubren al comenzar un tratamiento de depilación láser. Los vellos encarnados aparecen cuando el vello no puede salir correctamente a la superficie y queda atrapado bajo la piel, lo que genera inflamación, enrojecimiento e incluso infecciones. Esto es común en zonas como cavado, axilas o piernas, y más frecuente en pieles sensibles o con vello grueso.

La depilación láser actúa sobre la raíz del folículo piloso, debilitándolo progresivamente hasta que deja de generar vello. Al reducir el crecimiento y grosor del vello, también disminuye la probabilidad de que este se encarne. A medida que avanzan las sesiones, muchas personas notan que las lesiones, granitos y marcas causadas por vellos encarnados desaparecen o disminuyen notablemente.

Este cambio no solo mejora la estética de la piel, sino también su salud general. Menos inflamación, menos riesgo de infección y menos molestias. Además, al dejar de usar métodos agresivos como la cera (que suelen empeorar el problema), la piel se irrita mucho menos.

Por eso, si sufrís de vellos encarnados de forma frecuente, el láser no solo es una solución para eliminar el vello a largo plazo, sino también una forma efectiva de mejorar la textura y el aspecto de tu piel. Siempre recomendamos una evaluación personalizada para determinar la mejor estrategia según tu tipo de piel y zona afectada.